El tobillo

El esguince de tobillo es un accidente frecuente: casi 4000 casos por día en España. Aunque representa el traumatismo que afecta generalmente esta articulación, el tobillo puede verse afectado por fracturas e inflamaciones, en particular en el tendón de Aquiles. Más raramente, pero puede ser el principio de una artrosis.

El tobillo es la articulación entre la pierna y el pie. Está constituido por un conjunto óseo que incluye los extremos de la tibia, del peroné y del astrágalo, rodeado de una cápsula fibrosa, con ligamentos (internos, externos) y con tendones (extensores, flexores) que garantizan su movilidad y su estabilidad. 

Un traumatismo frecuente: el esguince de tobillo

El esguince de tobillo procede de un estiramiento o de un desgarramiento de los ligamentos de la articulación, principalmente ligamentos laterales externos. Se produce en un 50% de los casos durante una actividad deportiva. La persona experimenta un “crujido” asociado a un dolor vivo y aparece una hinchazón rápidamente en el maléolo. El esguince de tobillo puede clasificarse de benigno, con estiramiento de un ligamento, a grave, si los ligamentos se rompen y/o se añade una fractura. El tratamiento incluye reposo con elevación del miembro afectado, la aplicación de hielo, la colocación de una venda compresiva, analgésicos y la utilización de bastones para desplazarse. El tobillo debe inmovilizarse con órtesis o botas para caminar “Walkers” durante 1 a 3 semanas. Para la rehabilitación y la reanudación de la actividad, se recomienda la quinesiterapia y la utilización de una tobillera. En caso de fractura, puede ser necesaria una cirugía, la colocación de una bota para caminar o Walker.

Tendinitis y ruptura del talón de Aquiles

La tendinitis del talón de Aquiles es una inflamación del tendón situado entre el músculo de la pantorrilla y el talón, favorecida por movimientos repetitivos o una solicitación excesiva. Los hombres deportistas de 40 a 75 años son afectados en un 70% de los casos. El dolor se manifiesta a nivel del talón al inicio del entrenamiento o después de la actividad. El tratamiento incluye el reposo, la aplicación de frío y también la utilización de taloneras o de una tobillera para aliviar la carga en el tendón. La ruptura del tendón de Aquiles ocurre cuando la tensión se vuelve demasiado fuerte. Se acompaña de la percepción de un crujido, de un dolor vivo y de una imposibilidad de posar el pie sobre el suelo. Una cirugía y la utilización de una bota de caminar son a menudo necesarias para reparar el tendón e inmovilizarlo el tiempo necesario para que cicatrice.

La artrosis de tobillo

El desgaste del cartílago del tobillo es favorecido por traumatismos antiguos o una deformación del pie. La artrosis se manifiesta por dolores en la movilización del tobillo y rigideces. El tratamiento reposa en la corrección de un exceso de peso si existe, los medicamentos antiinflamatorios y analgésicos, la rehabilitación y la utilización de ortesis plantares.